Existen ciertas barreras en el camino de la autoconfianza y la superación personal que pueden ser un freno al propio desarrollo
Los humanos son seres perfectamente imperfectos, todos en este planeta, sin excepción, tienen defectos que para bien o para mal forman parte de su personalidad. El concepto que uno tiene de sí mismo se va formando a lo largo de la vida, cada fase o etapa aporta experiencias con las que se ponen a prueba nuestras habilidades. En ese sentido, se puede definir la autoconfianza como la relación que mantenemos con nosotros mismos y las propias capacidades y criterios; en resumen, está relacionada con la creencia de lograr lo que uno se plantea.
No obstante, existen barreras en la ruta hacia la autoconfianza y la superación personal que pueden ser un freno al propio desarrollo. Expertos en la salud mental y comportamiento humano se han dado a la tarea de investigar qué obstáculos existen para incrementar la autoconfianza. Carlos Rodríguez psicólogo español con residencia en Munich, Alemania, destacó algunos de ellos en su portal web.
5 obstáculos que impiden desarrollar la autoconfianza
1. Expectativas elevadas: de acuerdo con el experto, ser una persona que nunca se siente satisfecha, que se exige mucho sin poder regularlo, probablemente estés inmerso en un perfeccionismo no muy sano, por lo que eventualmente acabarás teniendo miedo al fracaso y a cometer errores. De esta forma podrás volverte muy autocrítico si no se cumplen tus expectativas lo que hará que mine posiblemente tu autoconfianza.
2. Juzgarse a uno mismo con severidad: en cierta medida, es normal porque todos albergamos de forma natural y evolutiva ese tipo de «autojuicios» nocivos originados cuando debemos lanzarnos a algo nuevo o pone en juego nuestra confianza. No obstante, hay que prestar atención a cuando ese inmovilismo impide llevar la vida que queremos llevar.
3. Preocuparse por el miedo. el miedo no es malo, es un sentimiento-respuesta a una amenaza real o imaginada. Todos tenemos nuestros miedos íntimos y personales. Cuanto más preocupados estemos con nuestros miedos, mayores se volverán estos, y lo más probable es que acaben socavando nuestra confianza. El reto relacionarnos con el de una mejor manera y no tanto evitarlo.
4. Falta de experiencia: si hemos tenido poca o ninguna experiencia en algo, no podemos esperar sentirnos muy confiados como es lógico. Pero si no nos lanzamos a adquirir esa misma experiencia quedaremos atrapados en la brecha de confianza que escribía antes.
5. Falta de habilidades: por lo regular, entre más practiquemos una actividad, sentiremos más confianza a la hora de hacerla. Nadie nace sabiendo hacer o desempeñar actividades específicas. La práctica es la clave para sentirnos confiados en algo, lo que sea: práctica, práctica, práctica. Ante ello, no hay que sentirnos tristes o frustrados porque algo no sale a la primera.
