Ya sea un sexy bikini, un bañador completo o de dos piezas, la tecnología ha hecho que el traje de baño se convierta en una prenda versátil que evoluciona en su diseño, el cual, ahora puede usarse hasta con looks del día a día.
Este año las tendencias en swimwear, apuestan por el movimiento Body positive (Cuerpo positivo), el cual promueve el mensaje de la inclusión de cuerpos diversos y de aceptarnos tal y como somos.
En este tema, uno de los objetivos de los diseñadores más reconocidos en el ámbito de la moda internacional, es hacernos sentir cómodos a la hora de lucir este tipo de ropa de playa, creando telas tecnológicas que ayudan a la libre transpiración, protegen de rayos UV y logran secarse de inmediato después de nadar.
Este tipo de propuesta fue presentada recientemente en un fashion show realizado en la terraza de un hotel del Centro Histórico de la Ciudad de México, al que asistieron invitados especiales quienes presenciaron una pasarela con modelos de cuerpos diversos y con capacidades diferentes.
Se trató de la nueva colección de Nike Swim, la cual presenta cuatro líneas, cada una pensada en los diferentes tipos de personalidades, gustos, necesidades y estilos desde los que incursionan en el mundo del deporte, hasta los que llevan un estilo causal y buscan vacacionar con toda la comodidad sin perder el estilo. Estas son: Explore collection, Icon collection, Perfomance collection y Essentials collection.
Conoce la historia del bañador
En 1927, la casa Speedo se convirtió en pionera en la creación de telas para trajes de baño, comercializando por primera vez el bañador Racerback con el que revolucionó este tipo de prendas, causando polémica en la sociedad de su época, ya que se ajustaba mucho al cuerpo.
La firma dejó a un lado el uso de la lana empleando seda en una confección que dejaba al descubierto espalda y hombros para facilitar el movimiento.
De acuerdo con información de la revista digital Cuaderno de Cultura Científica, este bañador fue innovador, sin embargo, en muchas playas se prohibió su uso.
Con el paso de los años se implementó el uso de la tela sintética de polímeros, lo cual permitió realizar bañadores más ligeros, entre ellos los de nylon (poliamida), en la década de los 50, o los de elastano (copolímero de poliurea poliéster), en los 70. Estos materiales eran bastante nuevos en aquella época, ya que fueron creados a principios y a mediados del siglo XX, respectivamente, por la casa DuPont. Durante los años siguientes la tendencia fue la misma: telas de polímero y bañadores más pequeños, ligeros y ajustados.
